En un encuentro con muchas situaciones para el local, River y G. Brown empataron 2 a 2. El gol sobre la hora del equipo de Puerto Madryn desató ira en los hinchas que se encontraban en la cancha, pero más aún, en los propios jugadores de La Banda.
El Millo comenzaba con el pie izquierdo, debido a que Brown se imponía por un gol a los 16 del P.T. River supo tener el control del juego y monopolizarlo. Con tiempo llegaron los goles, para darlo vuelta, uno de Cavenaghi y otro de Villalva.
Es cierto que el equipo dirigido por Matías Almeyda merecía muchos más goles, pero los goles no se merecen, se hacen. Debido a la diferencia por un solo gol a River le paso lo que muchos temían que podría pasar: el gol sobre la hora.
Esto ya le había pasado en varios encuentros anteriores a River, y este empate no fue la excepción. El gol sobre la hora, el empate, quedar temporalmente segundos, y los goles errados fueron todo un condimento para que los hinchas que se encontraban en el Monu se enfurecieran, chiflaran al equipo y hasta le tiraron proyectiles.
Cuando se retiraban un proyectil voló por sobre la cabeza de Fernando Cavenaghi. El capitán que había marcado un gol le quiso ir a responder y lo hizo. Luego el Chori Domínguez lo sacó para que no se generaran más disturbios.
Un empate que, sin dudas, dejará que hablar.